Ya comenté anteriormente lo que básicamente era el grupo Hiperión, pero, ahora hablaré acerca de los objetivos que tenían planteados y los cimientos que habían construido dicho grupo.
La filosofía del grupo Hiperión se cimentó, principalmente, en las obras de Antonio Caso, José Vasconcelos y Samuel Ramos. La tarea que ellos se autoencargaron fue la de responder qué es el mexicano. Buscaban esta respuesta porque querían que el mexicano se encontra consigo mismo, se saludará y se diera un abrazo, que se diera cuenta de la realidad mexicana y se pudiera llevar a cabo una transformación.
Para ellos, terminar esa investigación de lo que es el mexicano era comenzar las conversiones morales, políticas y sociales, que haría que México llegará a la soñada utopía, a una sociedad ideal mexicana.
Querían que México tuviera ese autoconocimiento y esa autoestima para llegar a ser lo que realmente podía ser, explotar las verdaderas capacidades y talentos que poseía. Pero no sólo querían eso, también buscaban que México tuviera una aportación significativa al mundo, una aportación filosófica que ayudara a los demás a llegar a una idealización.
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